El incremento de la competitividad de la empresa, por aplicación de una política empresarial de “low cost”, no justifica por sí misma la reducción del salario de los trabajadores
El Tribunal Supremo considera que la aplicación de una política de empresa de “low cost”, en busca de un incremento de la competitividad empresarial, no justifica una modificación sustancial de condiciones de carácter colectivo, cuando no concurren causas económicas.
17 de mayo de 2016El Tribunal Supremo considera que la aplicación de una política de empresa de “low cost”, en busca de un incremento de la competitividad empresarial, no justifica una modificación sustancial de condiciones de carácter colectivo, cuando no concurren causas económicas.