Introducción
Los trabajos que se reúnen en este primer Informe del Observatorio de Derechos Humanos de la Fundación Profesor Uría, uno por uno considerados, no necesitan presentación alguna. Lo que se cuenta en cada uno de ellos es transparente: la presencia de niños invisibles, en tanto su misma existencia no consta en registro alguno; la de adultos, en el otro extremo, que de forma no muy diferente podríamos calificar de desempadronados, ante la dificultad que encuentran para indicar un domicilio en su respectivo lugar de residencia: de un modo u otro, el Derecho no reconoce ni a unos ni a otros. Con la misma fuerza se imponen los casos reflejados en estos trabajos de violencia sexual en centros de acogida de menores; o, tratándose de adultos, los de las mujeres que huyen de sus países de origen, maltratadas por su sola condición de tales; o aun de quienes huyen de un permanente maltrato en su país en razón de su orientación sexual. Si por ello solamente fuera, escasa presentación necesita este Informe.